En el hemisferio sur comenzó el verano. Y aquí en Buenos Aires sí que se está haciendo sentir. Desde comienzos de semana la temperatura no ha bajado de los 32° C promedio, con picos de 37° C el día de ayer. En el momento que estoy escribiendo este post, la temperatura es de 31° (mediodía).
Con el calor, viene aparejado un gran consumo de líquidos, para apagar nuestra sed y mantener a nuestro cuerpo en equilibrio.
Eso me hizo pensar acerca de lo mal que se “toma”. Así como existe la comida chatarra, también está la bebida chatarra. Bebidas gaseosas con alto porcentaje de azúcares y químicos, la famosa Coca Cola (que según el mito popular sirve para aflojar tornillos imposibles), jugos en polvo con componentes de nombres extraños, bebidas alcoholicas de dudosa calidad, y sigue la lista.
La pregunta es ¿somos conscientes de lo que tomamos? ¿Aportan beneficios el consumo de estas bebidas como un hábito diario?
Durante mucho tiempo me ha costado mantener una conducta ordenada en cuanto a que tomar y que ésto sea beneficioso para mi cuerpo. Muchas gaseosas, jugos preparados (tipo Tang), algo de bebidas alcohólicas (solo en reuniones sociales), pero muy poca agua.
Hace ya unos meses decidí cambiar mis hábitos respecto a este tema. Prácticamente he dejado las bebidas gaseosas y jugos artificiales por el agua. Ah, todavía mantengo el habito de unas cervecitas (siempre con moderación) cuando me junto con mis amistades, es mi permitido. 🙂
Y puedo decir que se sienten los beneficios.
Trato de mantenerme en los dos litros de agua diarios, aunque según las circunstancias, como este agobiante calor que estamos padeciendo por estos pagos, la cantidad aumenta considerablemente.
Investigando más a fondo sobre este tema, encontré en la web algunas cosas importantes para tener en cuenta a la hora de tomar agua: sus beneficios, algunos aspectos para desarrollar el hábito de una manera simple y efectiva y algunos consejillos que pueden ayudar.
Los Beneficios del Agua
Piel más sana, limpia y sin arrugas. El agua representa el 70% del peso de las células, por lo tanto tomando agua se fortalecen las células de la piel, logrando humectarla, limpiarla y mantener su elasticidad (retrasando la formación de arrugas).
Bajar de peso. Ya vimos que con la cantidad de azucares que tiene la Coca-Cola, gran parte de nuestra gordura se la debemos a “la bebida rojiblanca”. En cambio el agua es recomendada en la mayoría de las dietas como uno de los factores principales por lo siguiente:
– Principalmente elimina el apetito.
– Con la suficiente cantidad de agua, los riñones se encargan de que la grasa que comemos, en vez de ser guardada en el cuerpo, sea usada como energía (o sea, con el tiempo, eliminada). Sin lo necesario, esa tarea la termina haciendo el hígado. Por lo tanto el hígado termina haciendo a medias una tarea, y descuidando otras para las que en realidad fue hecho.
– El cuerpo cuando nota que falta agua, guarda lo mejor que puede ese agua que le queda. Guarda afuera de las células y eso produce una “hinchazón” en el cuerpo (“estoy hecho una morsa!”). Lo mejor para ésto es darle agua como para que sepa que tiene, y que no guarde innecesariamente. O sea, para evitar guardar agua, hay que tomar más agua.
Mejor rendimiento Físico. Es recomendado tomar agua antes y después de alguna actividad o ejercicio físico para evitar, por ejemplo, calambres. El agua lubrica mejor las articulaciones y mejora la resistencia de músculos y ligamentos.
Por otro lado, ayuda a mantener los músculos tonificados y ayuda a evitar la flacidez de la piel de la persona que acaba de bajar peso (digamos, no te cuelga más una bolsa de piel abajo del brazo).
El agua funciona de “anti-acné”. Elimina toxinas, desechos del cuerpo y grasas, y mejora las defensas del cuerpo, por lo tanto ayuda a mejorar la salud y belleza del cuerpo en general, evitando enfermedades e infecciones.
Te mantiene despierto y lúcido. En el día a día, tu cuerpo pierde agua a través de la transpiración, la “orina”, la simple respiración, o hasta las lágrimas. Eso produce una deshidratación por lo menos mínima (pero deshidratación al fin), que puede llevar a problemas de atención, desgano (por falta de energía), cansancio, dolores de cabeza y hasta mal humor.
La solución: Obviamente, tomar agua para recuperar eso que perdimos.
Y varias cosas más… Como pueden ser evitar la “constipación”, regular la temperatura corporal, y una larga lista de etcéteras.
Cómo beber más agua cada día
Determina cuanta agua necesitas. Seguramente has escuchado que una persona normal necesita dos litros de agua por día pero la verdad es que la cantidad de agua que uno necesita varía de persona a persona. Una buena forma para determinar la cantidad de agua que deberías tomar es dividir tu peso(en libras) entre dos. Por ejemplo, si pesas 150 lbs. debes tomar 75 onzas de agua diariamente. Calculando lo mismo en kilos y litros debes dividir tu peso entre 30. Así, una persona que pese 70kg. necesita cerca de 2.3 litros por día
Registra la cantidad de agua que tomar diariamente. Haz esto por algunos días. Si encuentras que estás tomando menos agua de la recomendada, entonces intenta seguir los siguientes consejos.
Lleva una botella de agua u otro recipiente a cualquier lugar al que vayas. Después de un tiempo verás como tomas agua de manera instintiva y sin pensarlo.
Mantén un vaso de agua cerca de tí siempre que vayas a pasar mucho tiempo en el mismo lugar, por ejemplo en tu escritorio, frente a la computadora, de modo que siempre puedas beber de él.
Llevar un reloj digital y ajusta la alarma para que suena cada hora. Usa esto como un recordatorio para servirte un vaso de agua. Si bebes solamente 180 ml (6 onzas) por hora, al final del día habrás consumido 1.4 litros (48 onzas) al final de una jornada laboral de ocho horas.
Consigue un sistema de purificación de agua. El agua purificada sabe muy bien y puede hacer que el beberla sea más agradable. Ten cuidado, pues acostumbrarte al agua purificada puede significar que el agua entubada sepa mal en tu boca.
Consejos
Excepto en raros casos, no es necesario comprar agua embotellada. Las compañías que se dedican a vender de agua mantienen un interés comercial al tratar de hacernos ver que el agua que proviene del sistema de cañerias es mala para la salud. Sin embargo, hay que tener en cuenta las impurezas y químicos adicionados que existen en el agua de caño han sido relacionados con transtornos crónicos de la salud. Hervir el agua antes de beberla o usar un buen sistema de filtrado puede ayudar a reducir estos riesgos.
En vez de bebidas gaseosas, toma un vaso de agua. Puede que no tenga tanto sabor, pero es mucho más saludable que tomar casi diez cucharillas de azúcar blanca. Es además más barata, especialmente el agua que no es embotellada.
Si no puedes con el sabor del agua, intenta adicionarle un poco de jugo de frutas o el jugo de un limón, solamente lo suficiente como para que sientas un cambio en el sabor. Tener el agua refrigerada también puede ayudar a mejorar su sabor.
Beber un vaso completo de agua en la mañana al despertar ayuda a despertar el cuerpo y la mente. ¡Así que empieza el día con agua!
El agua ayuda a que te veas bien. El agua que ingieres ayuda a que tus riñones eliminen las impurezas mucho más rápidamente, lo cual significa que tendrás una piel mucho más clara, suave y joven.
El hambre puede ser controlada con agua. Bebe un vaso de agua fría 20 minutos antes de las comidas. El frío hace que tu estómago se encoja un poco, con lo que la sensación de estómago lleno vendrá más rápidamente. Algunos nutricionistas mencionan que sólo debemos beber agua 20 minutos antes de las comidas y 1 hora después. La teoría menciona que los jugos digestivos deben mantenerse sin diluir para que puedan digerir apropiadamente los alimentos.
Cada vez que pases por una fuente de agua o un depósito público de agua, toma un sorbo o dos.
Incrementa gradualmente la cantidad de agua que consumes diariamente. Por ejemplo, puedes empezar por un litro de agua al día y tratar de terminar con la cantidad recomendada, en el transcurso de la semana. Incrementa esta medida un poco cada día.
Haz la solemne promesa de solo beber agua durante un mes. Una vez que tu cuerpo se acostumbre a ella, será difícil para tí no beber suficiente agua. Además, para finales del mes el agua empezará a saber deliciosa. No hay trampa en esto.
Para obtener los vasos necesarios de agua, digamos 8, coloca 8 bandas para el cabello o algo similar en tu mano derecha. Cada que tomes un vaso de agua, pasa una de las bandas a tu mano izquierda. El objetivo es tener las ocho bandas en la mano izquierda antes que termine el día.
Si vas a beber agua fría, trata de hacerlo de un vaso de vidrio. Los vasos de plástico o de papel no mantienen el agua fría de la misma manera que el vidrio, así tu agua estará fría y deliciosa por más tiempo.
Si acostumbras comprar agua, quizá te resulte más económico adquirir «containers» de agua de 20 litros o más que botellas de 750 cc.
Advertencias
Incrementar la ingesta de agua puede provocar que te levantes en la noche para ir al baño. Para evitar este indeseable efecto puedes dejar de tomar agua unos cuantas horas antes de dormir o asegurarte de visitar el baño antes de acostarte.
Tomar suficiente agua es esencial, pero el consumo en exceso puede producir problemas en algunas personas. Ciertas personas con problemas cardiacos, presión alta o hinchamiento de la parte baja de las piernas deben evitar el exceso de agua. Si tienes un historial de problemas renales o especialmente si has tenido un trasplante, debes consultar a un médico antes de incrementar la ingesta de fluido.
No debes tomar demasiada agua mientras comes; esto puede producir que los ácidos de tu estómago se diluyan, lo cual puede producir problemas digestivos.
Si vives en un lugar caluroso, entonces debes incrementar la cantidad de agua.
Siempre consulta con tu médico de cabecera, sobre los problemas que la ingesta de agua te produzcan o cualquier otra consulta referida a ésta…
Cosas que necesitarás
- Agua
- Una botella en caso necesites llevar agua a los sitios donde acostumbras estar (opcional).
- Reloj con cronómetro.
- Material para anotar
- Un vaso.
Así que no hay excusa. ¡A tomar agua se ha dicho!
Extraido de WikiHow